Mirador Embalse de Maidevera

Naturaleza
Mirador Embalse de Maidevera

Mirador Embalse de Maidevera

Coordenadas geográficas: -1º79'3", 41º57'87"
Coordenadas UTM (ETRS89 H30): 600991, 4603917

El embalse de Maidevera, con una capacidad de 18,33 Hm3, se extiende en el término municipal de Aranda del Moncayo, entre el somontano sur de la cumbre moncaína y la Sierra de la Virgen. Es un espacio de singular belleza en el que se suceden muelas, vegas, sierras y barrancos. Para los amantes de la naturaleza resulta un escenario ideal para disfrutar del paisaje a través de agradables paseos.

El río Aranda nace de la confluencia de los arroyos Pedreñas, Valdepomer y Malache, que descienden desde la sierra del Tablado aunque, por la importancia de su caudal, cobra vida en el manantial de Lagüen, en Aranda del Moncayo. Desde su nacimiento, recibe las aguas de varios manantiales y, tras aportar sus recursos hídricos en el embalse de Maidevera, contornea los pueblos del valle situados en la falda norte de la sierra de la Virgen, para abastecer las vegas de Jarque, Gotor, Illueca y Brea.

El curso fluvial del Aranda presenta vegas muy transformadas por la acción del hombre. Sus componentes arbóreos, producto de repoblación, tienden a distribuirse alineados por la margen del río, formando los llamados bosques de galería compuestos de chopos, fresnos, olmos y sauces. La cercanía del nivel freático aumenta la riqueza florística, conviviendo sobre éstos hiedra, enredaderas, juncos, cola de caballo, carrizos y espadañas.

La cobertura vegetal es de características mediterráneas, predominando los bosques de pinos y robles. Dentro de estos dos ecosistemas (el pinar y el robledal) nos encontramos con un gran conjunto de vida vegetal: los suelos están cubiertos de musgos, líquenes, helechos y una gran riqueza de arbustos como la zarza, frambuesa, mostajo, espino, arándano, arce, endrino, madreselva, jara, varias especies de brezos, acebo, rosal silvestre, lavanda y romero.

Los anfibios, como la ranita de san Antonio, la rana común, la trucha y el tritón jaspeado, frecuentan el embalse de Maidevera. Las aves migratorias, de procedencia africana y de regiones mediterráneas, se instalan en el embalse de Maidevera como zona de paso, huyendo de la dureza estival de territorios subsaharianos y volviendo a ellos durante el otoño, cuando las temperaturas son más agradables. Destacan las cardelinas, gorriones, y abejarucos -aves migratorias que se concentran en grandes bandadas-, el pico picapinos, que agujerea los troncos de los pinos y luce unos vistosos tonos blancos, rojos y negros; la paloma torcaz, el ruiseñor y el alcaudón común; la oropéndola en valles y riberas –con su atractivo plumaje amarillo sobre las ramas verdes de los árboles-, vencejos, aviones, codornices, alcaravanes, golondrinas y un buen número de torcaces norteñas.

El embalse de Maidevera, cuenta con un coto de pesca en el que abundan las truchas, además, permite la práctica de numerosas actividades acuáticas como el piragüismo y el wind-surf.